Orígenes Su origen, no bien detallado, parece que la emparenta con las razas asturianas Tudanca y Monchina, y las Morenas del Noroeste, esto es, con el tronco cantábrico, si bien algunos apuntan su semejanza también con la Pujana de Sierra Nevada. La primera mención a una raza bovina propia del macizo de la Albera se remonta a 1868, aunque la primera descripción oficial data de 1953 (en ambos casos, en el lado francés).