Trayectoria artística Campeón de halterofilia en su juventud, comenzó estudios superiores inacabados de Ciencias Exactas y Arquitectura, y trabajó en el mundo del cómic como dibujante (también diseñó portadas de discos) y escribió novelas de acción. A finales de la década de 1960 empezó a dedicarse al cine —en realidad, ya había aparecido como extra en algunas películas, por ejemplo en dos de las que dirigió el cineasta estadounidense Nicholas Ray en España, como fueron Rey de reyes (1961) y 55 días en Pekín (1963)—, debutando como actor en Agonizando en el crimen (Enrique Eguiluz, 1967). Trabajó como ayudante de dirección de cineastas como Manuel Mur Oti o Pedro Lazaga.